En el antiguo Perú la mayoría de constelaciones que se veían en el cielo no estaban formadas por conjuntos de estrellas, como lo entendemos hoy nosotros, sino por las manchas negras, los espacios vacíos que hay entre los conjuntos de estrellas, la parte iluminada del cielo.
A continuación presentaremos el mito que se tiene en la provincia de Huarochirí (en la sierra de Lima) sobre esta constelación andina y la importancia que tiene para sus pobladores.
Mirando el cielo, la constelación andina se puede reconocer porque tiene la forma del cuello y la cabeza de una llama, y en el lugar de los ojos hay dos estrellas muy brillantes. Quizás por ser estas constelaciones andinas espacios oscuros, y por representar la llama, las llamas de lana negra eran muy usadas en las principales ceremonias religiosas del Tawantinsuyu.
El Mito de Yacana
La constelación que llamamos Yacana, es el camac de las llamas, osea su fuerza vital, el alma que las hace vivir. Yacana camina por un grán río (la Vía Láctea). En su recorrido se pone cada vez más negra. ene dos ojos y un cuello muy largo. Se cuenta que Yacana acostumbraba beber agua de cualquier manantial, y si se posaba encima de alguien le transmitia mucha suerte. Mientras este hombre se encontraba aplastado por la enorme cantidad de lana de Yacana, otros hombres le arrancaban la fibra. Todo esto ocurría siempre de noche.
Al amanecer del día siguiente se veía la lana que habían arrancado la noche anterior. Esta era de color azul, blanca, negra, parda, las había de toda clase, todas mezcladas. Si el hombre afortunado no tenía llamas, rápidamente compraba algunas y luego adoraba la lana de la Yacana en el lugar donde la habían arrancado. Tenía que comprar una llama hembra y otra llama macho, y sólo a partir de estas dos podía llegar a tener dos mil o tres mil. Esta era la suerte que la Yacana confería a quienes se posaba encima de ellos. Se cuenta que en tiempos muy antiguos, esto le ocurrió a muchas personas en muchos lugares. A la media noche y sin que nadie lo sepa la Yacana bebe toda el agua del mar, porque de no hacerlo el mar inundaría al mundo entero.
Yutu (la perdíz) es una constelación pequeña que aparece antes que la Yacana. Según cuenta la tradición, la Yacana tiene un hijo que cuando mama ésta se despierta. Tambien hay tres estrellas que caminan juntas y en línea recta. A éstas les han puesto los nombres de Kuntur (cóndor), Suyuntuy (gallinazo) y Huamán (halcón). La tradición cuenta que cuando aparecen estas estrellas más brillantes que antes, ese año será bueno para el cultivo. Si en cambio aparecen poco brillantes, ése será un mal año, con mucho sufrimiento.
Adaptación: Lizardo Tavera
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